Nuestra Iglesia Católica
Mateo 16:18: “Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella”
De tal manera amó Dios al mundo
Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna
María Nuestra Madre
Lucas 1:26-38 Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase á mí conforme á tu palabra. Y el ángel partió de ella.
Que todos sean uno
Juan 17:20-24 Padre, los que tú me has dado, quiero que donde yo esté estén también conmigo, para que contemplan mi gloria, la que me has dado, porque me has amado antes de la creación del mundo.
El Señor es mi pastor
El Señor es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar;junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre
sábado, 7 de marzo de 2015
miércoles, 18 de febrero de 2015
Miércoles de ceniza 2015
domingo, 8 de febrero de 2015
Lectura de la Portada Hoja Dominical Domingo 8 de Febrero de 2015
Año XLVIII - Domingo y del Tiempo Ordinario /B - 8 de Febrero de 2015
Fuente: Hoja Domingo |
P. Jean Pierre Wyssenbach, S.J.
viernes, 6 de febrero de 2015
Lecturas de la Misa Dominical 8 de Febrero 2015
Primera lectura
Lectura del libro de Job (7,1-4.6-7):
R/. Alabad al Señor,
que sana los corazones destrozados
Segunda lectura Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (9,16-19.22-23):
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san
Marcos (1,29-39):
lunes, 2 de febrero de 2015
Lecturas de la Liturgia de la Semana 2 al 8 de febrero de 2015
domingo, 1 de febrero de 2015
Lectura de la Portada de la Hoja Dominical Domigo 1 de Febrero 2015
viernes, 30 de enero de 2015
Lecturas de la Misa Dominical 1 de Febrero 2015
«No endurezcáis vuestro corazón»
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos. R/.
Entrad, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios, y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía. R/.
Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y me tentaron, aunque habían visto mis obras.» R/.